Humberto Campins, experto en asteroides de la Universidad de Florida Central (UCF), ha sido seleccionado para colaborar en la preparación de una misión única. Lo particular de la misión es su objetivo: traer a la Tierra una muestra de un asteroide primitivo y rico en compuestos orgánicos que no se encuentre en ninguna colección de meteoritos conocida.
Izquierda: Humberto Campins. Crédito: Departamento de Física de la UCF.
El asteroide en cuestión es, según lo planeado inicialmente, 1999 RQ36, que tiene un diámetro de apenas unos 50 metros. Este tipo de asteroide se formó en algún lugar entre Marte y Júpiter; sin embargo, su órbita actual lo acerca a la Tierra, incluso tan cerca como nuestra Luna. Esta situación especial lo hace muy accesible para que sea visitado por una nave.
La misión se llama OSIRIS-REx y está liderada por investigadores de la Universidad de Arizona en Tucson y es una de las misiones candidatas elegidas por la NASA para una misión futura dentro del programa New Frontiers (Nuevas Fronteras). Se espera que OSIRIS-REx se acerque hasta la superficie del asteroide y recoja una muestra de unos 50 gramos para enviarlos de regreso a nuestro planeta. El equipo ya ha recibido unos 3,3 millones de dólares para completar el plan de estudio de misión que durará de 12 meses. Recién entonces, la NASA decidirá cuál de los tres proyectos recibirá fondos para ser lanzado en 2016.
Campins es actualmente profesor de la UCF y es muy conocido por su experiencia en asteroides. No es ajeno a las misiones espaciales, ya que recientemente trabajó con el Telescopio Espacial Spitzer de la NASA.
Campins es además miembro de la Misión Marco Polo, patrocinada por la Agencia Espacial Europea (ESA), y cuya tarea es explorar qué asteroides pueden revelar los secretos sobre el origen del Sistema Solar.
El año pasado, Campins anunció hallazgos sorprendentes sobre la presencia de hielo de agua en un asteroide que recibió atención mediática. Recientemente, Campins publicó un estudio sobre un asteroide similar al que el equipo de OSIRIS-REx identificó como objetivo para la futura misión de la NASA.
Arriba: Representación artística de la misión OSIRIS-REx. Crédito: NASA.
Un conocimiento detallado de la superficie de un asteroide, incluyendo si contiene polvo o rocas, "podría decirnos muchos sobre cómo se formó el Sistema Solar y qué significa eso para nuestro futuro." afirmó Campins.
Más información:
Artículo en la Universidad de Florida Central
OSIRIS-REx en Twitter
Página del Programa New Frontiers (NASA)
Fuente: UCF/NASA.
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Izquierda: Humberto Campins. Crédito: Departamento de Física de la UCF.
El asteroide en cuestión es, según lo planeado inicialmente, 1999 RQ36, que tiene un diámetro de apenas unos 50 metros. Este tipo de asteroide se formó en algún lugar entre Marte y Júpiter; sin embargo, su órbita actual lo acerca a la Tierra, incluso tan cerca como nuestra Luna. Esta situación especial lo hace muy accesible para que sea visitado por una nave.
La misión se llama OSIRIS-REx y está liderada por investigadores de la Universidad de Arizona en Tucson y es una de las misiones candidatas elegidas por la NASA para una misión futura dentro del programa New Frontiers (Nuevas Fronteras). Se espera que OSIRIS-REx se acerque hasta la superficie del asteroide y recoja una muestra de unos 50 gramos para enviarlos de regreso a nuestro planeta. El equipo ya ha recibido unos 3,3 millones de dólares para completar el plan de estudio de misión que durará de 12 meses. Recién entonces, la NASA decidirá cuál de los tres proyectos recibirá fondos para ser lanzado en 2016.
Campins es actualmente profesor de la UCF y es muy conocido por su experiencia en asteroides. No es ajeno a las misiones espaciales, ya que recientemente trabajó con el Telescopio Espacial Spitzer de la NASA.
Campins es además miembro de la Misión Marco Polo, patrocinada por la Agencia Espacial Europea (ESA), y cuya tarea es explorar qué asteroides pueden revelar los secretos sobre el origen del Sistema Solar.
El año pasado, Campins anunció hallazgos sorprendentes sobre la presencia de hielo de agua en un asteroide que recibió atención mediática. Recientemente, Campins publicó un estudio sobre un asteroide similar al que el equipo de OSIRIS-REx identificó como objetivo para la futura misión de la NASA.
Arriba: Representación artística de la misión OSIRIS-REx. Crédito: NASA.
Un conocimiento detallado de la superficie de un asteroide, incluyendo si contiene polvo o rocas, "podría decirnos muchos sobre cómo se formó el Sistema Solar y qué significa eso para nuestro futuro." afirmó Campins.
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Artículo en la Universidad de Florida Central
OSIRIS-REx en Twitter
Página del Programa New Frontiers (NASA)
Fuente: UCF/NASA.